Henri Matisse, "Portrait of Lydia Delectorskaya"
impedir a la luna/ revelar
los secretos del rocío/para
que nadie más sepa/que
excepto tu nombre/
todas las palabras/son
limosnas/son
heridas/son
ajenas/son
heladas/son
terribles/son
muy feas/ y me quedan
grandes
Qué bonitas palabras. Hasta yo, en mi mundo feo, las saboreo.
ResponderBorrarBesoss
Tu mundo no es feo.
ResponderBorrarPor lo menos no el de tu rincón.
Puede ser audaz y valiente, pero no feo